sábado, 30 de junio de 2012

DOMINGO XIII DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio

En aquel tiempo, se acercó a Jesús un jefe de la sinagoga, llamado Jairo, y, al verlo, se echó a sus pies, rogándole: «Mi niña está en las últimas; ven, impón las manos sobre ella, para que se cure y viva». Se fue con él y lo seguía mucha gente que lo apretujaba. Había una mujer que padecía flujos de sangre desde hacía doce años... Acercándose entre la gente, le tocó el manto... Inmediatamente notó que estaba curada... Se le echó a los pies. Jesús le dice: «Hija, tu fe te ha salvado. Vete en paz».
Todavía estaba hablando, cuando llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle: «Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al Maestro?» Jesús alcanzó a oírlo y le dijo al jefe de la sinagoga: «No temas; basta que tengas fe». Llegaron a la casa y encuentra el alboroto de los que lloraban y se lamentaban a gritos, y les dijo: «¿Qué estrépito y lloros son éstos? La niña no está muerta; está dormida». Se reían de Él. Pero Él los echó fuera a todos y, con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes, entró donde estaba la niña, la cogió de la mano y le dijo: «Talitha qumi» (Contigo hablo, niña, levántate). La niña se levantó y echó a andar; tenía doce años. Quedaron llenos de estupor. Insistió en que nadie se enterase; dijo que dieran de comer a la niña.

Marcos 5, 21-43
 
El mensaje del Evangelio de este domingo es una invitación a la fe en Cristo. La Buena Nueva del Evangelio es anuncio de la voluntad de Dios, del proyecto de Dios, que es un designio de amor y de vida, y que, en esta ocasión, se manifiesta en la curación de la hemorroísa y en la resurrección de una niña. Jesús, el Señor de la vida, responde así a la fe de una mujer enferma y a la súplica de un padre afligido que intercede por su hija. Se trata de Jairo, un padre desolado por la grave enfermedad de su hija, que se acerca a Jesús y le ruega que vaya a su casa y le imponga las manos para curarla. Ha oído hablar del gran poder sanador que tiene Jesús y pide, con confianza, la curación. Todavía están hablando cuando le avisan de que la niña ha muerto y que no vale la pena molestar más al Maestro. Pero el Maestro le recomienda, sobre todo, que tenga fe, y al llegar a la casa, sorprendentemente, afirma que la niña no ha muerto, que está dormida. Seguidamente se acerca al lecho, la toma de la mano y le dice: «Contigo hablo, niña, levántate». Y con toda naturalidad la pequeña se levanta y echa a andar.
Cristo es Señor de la vida y de la muerte, y así se manifiesta resucitando a la niña. Ha venido para darnos vida, una vida abundante. Pero es preciso que tengamos fe, que confiemos en Él. La fe es la condición indispensable para entrar en el reino de los cielos, para recibir el don de Dios. Fe y confianza, abandono en sus manos, conciencia de la propia impotencia y confesión de nuestra esperanza en el poder de Dios. Ésa es la disposición que ha de tener todo aquel que se acerca pidiéndole una curación. Es la actitud que recomienda a Jairo cuando le avisan de que su hija ha muerto.
Vemos a Cristo, vencedor de la enfermedad y de la muerte, que exhorta a sus discípulos a que tengan fe. Eso no significa que, por ser creyentes, quedemos exentos de todo mal físico o de la muerte temporal, pues Cristo mismo quiso experimentar el cansancio, el dolor y la muerte, y muerte en cruz. Pero el mismo Cristo que devuelve la salud a la hemorroísa y la vida a la hija de Jairo es el que venció a la muerte con su resurrección. Por eso contemplamos en este episodio la fuerza y el poder de Dios, que ama la vida, que vence a la muerte. Este milagro es un signo del poder y del amor de Dios que llama a sus hijos a la salvación y a la vida eterna. Por nuestra parte, será preciso pedir al Señor que aumente nuestra fe, que nos conceda la gracia -en palabras de la Carta apostólica Porta fidei- de «redescubrir el camino de la fe para iluminar, de manera cada vez más clara, la alegría y el entusiasmo renovado del encuentro con Cristo». Ése es el objetivo que nos propone el Santo Padre Benedicto XVI al convocar el Año de la fe.
+ José Ángel Saiz Meneses
obispo de Tarrasa
 
 
 

viernes, 29 de junio de 2012

SAN PEDRO Y SAN PABLO

Los más pequeños de nuestra Parroquia, están de campamento en Casalgordo. Hoy festividad de S. Pedro y S. Pablo, oramos especialmente por ellos, por sus monitores, por sus familias. Que tengan una experiencia viva de Jesús en sus vidas.

Pobre Sara Carbonero. Para quien no lo sepa Sara es periodista deportivo y novia del portero de la selección española de fútbol. Es más conocida por lo segundo que por lo primero. No tiene grandes intervenciones periodísticas y cuando informa a pie de campo siempre acababan sus compañeros con la frase: “Gracias Sara”. Como el que tiene boca se equivoca de vez en cuando metía la pata y así se formó un grupo en twitter que se llama “Gracias Sara” en el que la gente pone las tonterías (hay que reconocer que bastantes graciosas, otras no), una detrás de otra. La periodista se ha enfadado, no me extraña. Encima ayer se equivoca y pregunta a Iniesta después del partido si le hubiera gustado tirar algún penalti…, cuando había tirado el segundo de la selección española. Ya tendrá que tomárselo con humor y dedicarse cada día a formarse para ser mejor periodista y tener paciencia. Me imagino que los amigos de verdad no se reirán de ella y la apoyarán en esta anécdota de su vida.

“Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará.” Si últimamente la gente se mete con Sara Carbonero lleva muchísimo mas tiempo metiéndose con la Iglesia. Lo que pasa es que parece que los cristianos nos unimos muchas veces a las críticas. Reconozco que soy culpable de darme casi todos los días unas vueltas por blogs, páginas y articulistas que se llaman católicos (y lo serán casi todos), pero que van presentando a la Iglesia como una simple organización de más o menos poder y alimentan en nuestra alma el cotilleo, la habladuría, el buscar dobles intenciones y la opinión fácil, rápida y superficial. Me imagino que si alguien abriese un blog sobre mi madre y viese que habla de ella como de una cualquiera ni me asomaría a mirarlo y mucho menos favorecería la difusión de dicha página. Uno puede leerlas pensando que así está mejor informado de lo que pasa pero lo importante de la Iglesia nunca se encontrará en “lo que pasa”, sino en lo que es.

Los enemigos de fuera siempre existirán. San Pedro y San Pablo son testigos directos de ello. La lástima es que sean -seamos-, los propios hijos de la Iglesia los que parece que cuando decimos que la Iglesia es Una, Santa, Católica y Apostólica estamos hablando de algo vacío, irreal y que tal vez lo veamos en la eternidad. Tendríamos que volver a hacer oración sobre la belleza de la Iglesia. Buscar no el escándalo o el pecado, sino la virtud y la acción de Dios en el mundo por medio de su Iglesia. Ojalá cada uno nos sintiésemos orgullosos de la Iglesia como lo estamos de nuestra Madre. ¡Qué lástima da cuando nos juntamos curas, monjas o laicos comprometidos y parece que la Iglesia es nuestra enemiga! ¡Con qué alegría juzgamos al Papa y nos sentamos en su Cátedra mientras miramos al mundo por un canuto en vez de ver la Iglesia Universal con los ojos de la fe!

“El Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león. El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo”. La Iglesia lleva veinte siglos anunciando a Cristo en su plenitud. A pesar de los enemigos de dentro y de fuera, a pesar de nuestros pecados, tibiezas, incoherencias y deslealtades. La Iglesia no nació como un grupo opositor a Judas, sino para anunciar la alegría de la Redención.

Amar a la Iglesia y al Papa. Y no de boquilla o en un pequeño comentario o artículo religioso, sino con obras y de verdad. San Pedro, San Pablo y millares de mártires en la historia -hoy en día también-, han dado su sangre por amor a la Iglesia, cuerpo de Cristo. Busquemos lo bello de la Iglesia y curemos las heridas que la hacemos en la historia.

María es Madre de la Iglesia y ella sólo tiene cosas bellas entre sus brazos, a ella nos encomendamos especialmente.

¡Sara, también estamos contigo!

Del comentario a la liturgia del día en www.archimadrid.org

jueves, 28 de junio de 2012

TE PUEDE PASAR A TI

Ya tenemos nueva entrega de "Te puede pasar a tí" de J. R. Cotelo.

¿DIOS AMA A LOS HOMOSEXUALES? - CAPÍTULO 2 - TE PUEDE PASAR A TI from infinitomasuno.org on Vimeo.

miércoles, 27 de junio de 2012

MERO CRISTIANISMO

En 1942, en plena Guerra Mundial, C. S. Lewis empezó a radiar por la BBC una serie de charlas sobre religión que pronto se convertirían en uno de los libros cristianos más influyentes del siglo XX y quizá también del XXI: "Mero Cristianismo".

Lewis era filólogo, intelectual, profesor de Oxford, un enamorado de la literatura medieval, los cuentos de hadas y la mitología nórdica. Y era converso al cristianismo.

La conversión de un ateoEn 1913, cuando tenía 15 años, abandonó la tibia fe cristiana de su familia. Hasta 1929, con 31 años, no aceptó el teísmo. Su viaje detallado se puede leer en "Cautivado por la Alegría": "me rendí, y admití que Dios era Dios, y me arrodillé y recé", explica de ese momento.

Pero aún no creía en las enseñanzas del cristianismo. Eso llegó dos años después, en 1931, después de un largo paseo una tarde de Septiembre con J. R. R. Tolkien y su amigo común Hugo Dyson. Hablaron de cómo los mitos paganos y el deseo del hombre prefiguran una realidad que se cumple de verdad, realmente, en Jesucristo. Al día siguiente de aquella charla, Lewis se convirtió a la fe cristiana. Salió con su hermano en motocicleta hacia el zoo. Al salir, escribe, no creía que Jesucristo fuese el Hijo de Dios, "y cuando llegamos al zoo sí lo creía".

Tolkien, con El Señor de los Anillos, llegaría a millones de personas. Lewis lo haría con sus cuentos de Crónicas de Narnia. Ambos son clásicos ya, no envejecen y tocan innumerables corazones cada generación.

Pero a nivel religioso, las charlas radiofónicas de Lewis de hace 70 años han dado un fruto especial llevando a la fe a mucha gente, que a su vez han influido a otras muchas personas.

Un libro que genera evangelizadoresAsí, Scott Hahn, famoso autor de "Roma dulce hogar" y "La fe es razonable", aceptó plenamente el cristianismo en su juventud y realizó su primera oración adulta de aceptación de Cristo después de leer "Mero Cristianismo".

El recientemente fallecido Charles Colson, que sería fundador del extenso movimiento evangélico Prison Fellowship, premio Templeton y uno de los grandes promotores de la Declaración de Manhattan y la iniciativa Evangélicos y Católicos Unidos, siempre a favor de alianzas por la vida y los valores, se convirtió en la cárcel, leyendo Mero Cristianismo.

Tocó a científicos y filósofosFrancis Collins, uno de los líderes del proyecto Genoma Humano, designado por Barack Obama para dirigir los Institutos Nacionales de Salud de Maryland, pilar de la investigación y gestión sanitaria en EEUU, era un joven ateo hasta que, después de morir sus padres, se convirtió leyendo "Mero Cristianismo". Ha escrito el libro "El lenguaje de Dios", sobre cómo lo que la ciencia va descubriendo es compatible con la postura cristiana.

Ya en tiempos del mismo Lewis, el filósofo y divulgador inglés C.E.M. Joad, muy popular por sus programas radiofónicos en la BBC, retornó a la fe cristiana, en parte, por los escritos y los debates públicos de Lewis. Escribió "The Recovery of Belief" sobre su vuelta al cristianismo poco antes de morir en 1953.

Cursos Alpha y el trilemaLos Cursos Alpha de nueva evangelización, que nacieron en la Iglesia Anglicana, usan con frecuencia ideas y argumentos de C.S. Lewis a quien recomiendan continuamente, especialmente por su libro Mero Cristianismo. Alpha ha llegado a muchos millones de personas en todo el mundo y siempre cita a Lewis.

De él toma el planteamiento del "trilema": o Cristo era un loco, o era un estafador o, si dice la verdad, es quien dice ser: ¡el mismo Dios hecho hombre!

Convirtiendo blogueras de hoyIncluso en pleno siglo XXI se siguen dando casos influyentes, como el de la famosa bloguera Jennifer Fulwiler, que abandonó el ateísmo después de leer dos libros de ex-ateos: The case for Christ, de Lee Strobel, y Mero Cristianismo, de Lewis, como explicó en ConversionDiary. Jennifer escribe ahora su blog en el National Catholic Register, seguido por miles de lectores, visitado por docenas de ateos cada día, y sus ideas y testimonio resuenan con fuerza en el Internet católico.

No es extraño que en la revista Christianity Today figurase como el tercer libro del siglo XX más influyente entre los evangélicos, sobre una lista de 50 (otros dos libros de Lewis aparecían en la lista).

Habría que ver también su efecto entre los católicos, aunque Hahn o Fulwiler no habrían llegado al catolicismo sin pasar por este libro de Lewis, que hasta su muerte se mantuvo anglicano "de centro", con pasión evangélica pero gusto por la sacramentalidad anglocatólica.

Su secretario Walter Hooper, que se convertió al catolicismo tras la muerte del escritor, cree que probablemente Lewis lo habría hecho dada la deriva extraña del anglicanismo con sus sacerdotisas y teología liberal.

La edición del libro en España, de Rialp, lleva 6 ediciones. Es posible encontrarlo íntegro por capítulos en Internet, pero es un libro que requiere cierta tranquilidad y es mejor leerlo en papel y llevarlo en el bolso, a la playa, etc...

MeroCristianismo en YouTubeTambién es posible escucharlo leído en Internet. en inglés en YouTube. En español de América se puede escuchar en www.proyeccioncreativa.com/cslewis/mc .

Tiene mucho sentido este formato, puesto que nació como unas charlas radiofónicas. Planchar o fregar mientras se escucha a Lewis es una experiencia que puede cambiar vidas.

Hay quien dice que el libro no es muy eficaz para ateos que nunca han tenido relación con el cristianismo o ateos militantemente hostiles contra la fe. En cambio, parece ser especialmente bueno con aquellos que están en una situación parecida a la del joven Lewis: gente que creyó saber algo de la fe hasta su adolescencia y luego la descartó, sin conocerla apenas, que es el caso más común en Occidente.

A los 70 años de su emisión entre las bombas nazis, Mero Cristianismo no ha envejecido nada, robustece la fe de los que dudan y abre nuevos horizontes a los que se hacen preguntas. Combinado con otras grandes obras de Lewis, como las Crónicas de Narnia y las Cartas del Diablo a su sobrino, aporta una impresionante dieta al pensamiento y la imaginación.
Publicado en ReL


martes, 26 de junio de 2012

S. JOSÉ MARÍA ESCRIVÁ DE BALAGUER

La Iglesia recuerda hoy a este gran santo.
En nuestra Parroquia se celebrará hoy el funeral por el alma de D. Martín Martín Martín-Tereso, sacerdote natural de Sonseca, fallecido hace un año en Argentina.


Infancia y Juventud

Josemaría Escrivá de Balaguer nació en Barbastro (Huesca, España) el 9 de enero de 1902. Sus padres se llamaban José y Dolores. Tuvo cinco hermanos: Carmen (1899-1957), Santiago (1919-1994) y otras tres hermanas menores que él, que murieron cuando eran niñas. El matrimonio Escrivá dio a sus hijos una profunda educación cristiana.

En 1915 quebró el negocio del padre, que era un industrial de tejidos, y hubo de trasladarse a Logroño, donde encontró otro trabajo. En esa ciudad, Josemaría percibe por primera vez su vocación: después de ver unas huellas en la nieve de los pies descalzos de un religioso, intuye que Dios desea algo de él, aunque no sabe exactamente qué es. Piensa que podrá descubrirlo más fácilmente si se hace sacerdote, y comienza a prepararse primero en Logroño y más tarde en el seminario de Zaragoza. Siguiendo un consejo de su padre, en la Universidad de Zaragoza estudiará también la carrera civil de derecho como alumno libre.
En nuestra Parroquia, se celebrará hoy a las ocho y media, el funeral por el alma de D. Martín Martín Tereso, sacerdote natural de Sonseca, fallecido hace un año en Argentina.

Puedes seguir leyendo AQUÍ...

Y ver la película basada en su vida "Encontrarás dragones"

lunes, 25 de junio de 2012

GRATITUD

Poner todo nuestro empeño en vivir en clave de Gratitud desde el amanecer hasta el anochecer, en un AHORA permanente que es lo único de que disponemos.

Actitud positiva en la vida. Observarlo todo y quedarnos con lo bueno. Esta apuesta nos ahorrará muchas ansiedades, depresiones, sinsabores. No se trata de meternos en el papel de Alicia en el país de las maravillas, pues es sano y liberador vivir desde la orilla de la realidad como una unidad, sin fragmentarla en bueno-malo, positivo-negativo, sino contemplándola toda ella en su conjunto quedándonos con lo bueno.

Resulta paradójico que lo que tildamos de negativo, doloroso -en muchas ocasiones lo es y ¡cómo!- trae bajo el brazo crecimiento, aprendizaje, superación.

Revolcarnos en el sufrimiento sólo es apto para víctimas y victimismos: no es éste el sendero, pues no lleva a ningún sitio, más que a lamerse una y otra vez las heridas. Lo que aquí proponemos es extraer de la situación dolorosa lo que nos reporta crecimiento en nuestras capacidades físicas, afectivas y mentales.

En clave cristiana todo lo dicho hasta ahora se traduce en Es bueno dar gracias al Señor; proclamad por la mañana tu misericordia y por la noche tu fidelidad (Sal 91
Sor Mª Angeles Calleja

sábado, 23 de junio de 2012

SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA

Evangelio

A Isabel se le cumplió el tiempo y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y se alegraban con ella. A los ocho días vinieron a circuncidar al niño, y querían llamarlo Zacarías, como su padre; pero la madre intervino diciendo:
«¡No! Se va a llamar Juan».
Y le dijeron: «Ninguno de tus parientes se llama así».
Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: «Juan es su nombre». Y todos se quedaron maravillados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y se comentaban todos estos hechos por toda la montaña de Judea. Y todos los que los oían reflexionaban diciendo:
«Pues ¿qué será este niño?» Porque la mano del Señor estaba con él.
El niño crecía y se fortalecía en el espíritu, y vivía en lugares desiertos hasta los días de su manifestación a Israel.

Lucas 1, 57-66.
 
Este domingo, 24 de junio, contemplamos el nacimiento de san Juan Bautista, el Precursor, la voz que anuncia a Jesucristo. Se trata de un nacimiento rodeado de signos prodigiosos, puesto que Juan nace de Isabel, que ya era una anciana lógicamente estéril; por otra parte, Zacarías, el padre, había perdido el habla en el templo, a causa de su incredulidad, y la recobrará justamente cuando ponga a su hijo el nombre de Juan. Estos acontecimientos sobrecogen a los vecinos y conocidos y se comentan por toda la montaña de Judea, y llevan a la certeza de que la mano del Señor está con este niño.
La misión de Juan consistirá en dar testimonio de la Luz, por eso invitará a la conversión, a abrir las puertas del corazón y acoger la luz de Cristo. Su figura permanece actual, a pesar del paso del tiempo, íntimamente unida a la venida de Cristo y también a su obra, que anuncia la redención del mundo. Su ejemplo se mantiene vivo a los ojos de la Iglesia, que ha de vivir en conversión continua y preparar los caminos del Señor anunciando la Buena Nueva.
Desde Jerusalén y desde toda Judea, la gente llegaba para escuchar su palabra y para hacerse bautizar en el Jordán. Su fama creció hasta el punto de que muchos pensaban que quizá era el Mesías, pero él lo niega con rotundidad cuando es preguntado al respecto. Lleva a cabo su misión desde el testimonio de una vida íntegra y austera; con humildad, orientando a sus discípulos hacia el encuentro con Cristo; predicando la conversión con valentía, con parresia, y manteniéndose fiel hasta la muerte.
La humildad sitúa a la persona en la verdad y la libera de la vanidad y de la soberbia. La persona humilde reconoce que todo lo ha recibido de Dios. Nace del sentido de Dios, de la conciencia de su realidad, de su omnipotencia, de la experiencia de que todo es don suyo. La humildad se aprende también en la contemplación de Cristo Redentor y de su camino de humillación hasta la muerte en cruz. No se trata sólo de una virtud importante, sino que viene a ser como el fundamento de todas las virtudes.
También es preciso anunciar la Buena Nueva con firmeza, con parresia, como hace Juan Bautista. Él da testimonio de la verdad desde la libertad. En el momento presente, tanto de forma personal como comunitaria, hemos de ser firmes y decididos, a la hora de dar testimonio de nuestra fe en Cristo con libertad, con valentía y sin ambigüedades. Porque ésta es una característica esencial de la misión evangelizadora de la Iglesia y de cada cristiano, el hablar con coraje, con libertad y sin temor. El Bautista nos da ejemplo de firmeza en el testimonio, y de verdadera humildad, no buscando la propia gloria, sino la gloria de Dios.
+ José Ángel Saiz Meneses
obispo de Tarrasa
 
 

viernes, 22 de junio de 2012

HOY STO TOMÁS MORO

Tomás Moro nació el año 1477, y completó sus estudios en Oxford; se casó y tuvo un hijo y tres hijas.

Ocupó el cargo de Canciller del reino. Intimo compañero y amigo personal del rey Enrique VIII, abogado distinguido, notable humanista de gran cultura, amigo de Erasmo, cariñoso padre de familia, caballero simpático por su buen humor y, además católico fevoroso.

Cuando vió que era incompatible con su religión el juramento de sumisión a Enrique como cabeza de la Iglesia en Inglaterra, presentó du dimisión, intentando vivir una vida tranquila con su familia, sin más complicaciones. Pero fue apresado y metido en la Torre de Londres.

A todos los esfuerzos de sus amigos para convencerle de que debía prestar su juramento contestó sencillamente que no podía reconciliarlo con su conciencia.

Cuando su propia mujer le insiste a hacerlo por lo que ella juzgaba que era bien para su casa, le contestó: «¿Cuántos años crees que podría vivir en mi casa?» «Por lo menos veinte, porque no eres viejo», le dijo ella. «Muy mala ganga, puesto que quieres que cambie por veinte años toda la eternidad».

Escribió varias obras sobre el arte de gobernar y en defensa de la religión.

Junto con Juan Fisher se opuso al rey Enrique VIII en la cuestión de su pretendida anulación de matrimonio, fue decapitado el año 1535: Juan Fisher el día 22 de Junio, Tomás Moro el día 6 de Julio, después de quince meses de cárcel donde escribió «Diálogo en tiempo de tribulación». El obispo Juan Fisher, mientras estaba en la cárcel, fue designado cardenal por el Papa Pablo III.

Claro, la fe no es sólo una cuestión de cabeza, de saber, quiero de decir de instrucción o de conocimiento; implica a toda la persona creyente y la lleva a determinaciones prácticas que, en ocasiones «límite», se resuelven con la entrega de la vida.
Fuente: Catholic.net

Puedes ver la película "Un hombre para la eternidad":

jueves, 21 de junio de 2012

ENRICO, SU ESPOSO, HABLA DE CHIARA CORBELLA

El blog Todo era bueno, nos dió a conocer la vida y la muerte de Chiara y ahora, siguiendo su invitación, difundimos la entrevista que Radio Vaticano, hizo a Enrico, esposo de Chiara

Unas palabras de Enrico Petrillo, el marido de Chiara Corbella, en una entrevista a Radio Vaticana.
Lo vivido por este matrimonio, con la luminosidad y la violencia con que la Gracia irrumpe en la vida de los hombres, no deja de causar estupor.

Leed. Pensad. Rezad. Difundid. Alegraos.


Vivir con mi mujer, con Clara, sea como novios, sea como esposos, ha sido precioso. Hemos tenido una vida verdaderamente plena. No sé bien cómo definirla. Incluso a través de la vida de nuestros hijos hemos descubierto que la vida, treinta minutos o cien años, no es muy diferente. Y siempre ha sido maravilloso descubrir este amor más grande cada vez que afrontábamos un problema, un drama. En realidad nosotros en la fe veíamos que detrás de esto se escondía una gracia más grande del Señor. Y por tanto, nos enamorábamos cada vez más de nosotros y de Jesús. Este amor no nos había desilusionado nunca, y por eso, cada vez, no perdíamos tiempo, aunque todos alrededor de nosotros nos decían: "Esperad, no tengáis prisa de tener otro hijo". En cambio nosotros decíamos: "Pero, ¿por qué tenemos que esperar?" Así, hemos vivido este amor más fuerte que la muerte. La gracia que nos ha dado el Señor ha sido la de no haber puesto dificultades, barreras, a su gracia. Hemos dicho este "sí", nos hemos agarrado a él con todas nuestras fuerzas, porque lo que nos pedía era sin duda más grande que nosotros. Y por eso, teniendo esa consciencia, sabíamos que solos no lo hubiéramos podido conseguir, pero con él sí. Hemos tenido un noviazgo normal, lo hemos dejado, peleábamos un poco, como todos los novios. Pero en un momento determinado, cuando hemos decidido hacer las cosas seriamente, todo ha cambiado. Hemos descubierto que lo único extraordinario es la vida misma. Dice el Señor: "A cuantos le han acogido les ha dado el poder de llegar a ser hijos de Dios". Clara y yo hemos deseado profundamente esto: llegar a ser hijos de Dios. Somos nosotros los que debemos elegir si esta vida es una casualidad o si en cambio existe un Padre que nos ha creado y nos ama.

-Lo que ha ocurrido a Clara se parece mucho a la experiencia de Gianna Beretta Molla que Juan Pablo II definió como un himno a la vida, una santa de la cotidianidad. El amor por la vida, como nos contabas, es precisamente lo que ha guiado a Clara en toda su vida

Sí. Es justamente así. Clara desde pequeña ha sido educada por unos buenos padres en el cristianismo, en el encuentro con Jesús, y pronto ha manifestado una sensibilidad y una docilidad al Espíritu muy especial, nutriendo también desde pequeña una relación muy especial con la Virgen María. Esto lo ha tenido siempre consigo y, lógicamente, si amas a Jesucristo, ¿cómo no amar la vida en todos sus aspectos?

-En un film sobre YouTube Clara ha dicho esta frase: "El Señor mete la verdad en cada uno de nosotros; no hay posibilidad de no entender". A la luz de lo ocurrido -de los dolores, de las incertezas, de las elecciones hechas- ¿cuál es la verdad que has descubierto?

Esa frase se refiere al hecho de que el mundo de hoy, en nuestra opinión, te propone elecciones equivocadas frente al aborto, frente a un niño enfermo, frente a un anciano terminal, quizá con la eutanasia... El Señor responde con esta historia nuestra, que, como te he dicho antes, un poco se ha escrito sola: nosotros hemos sido un poco espectadores de nosotros mismos, en estos años. Responde a muchas preguntas que son de una profundidad increíble. El Señor, sin embargo, responde siempre muy claramente. Es a nosotros a quienes nos gusta filosofar sobre la vida, sobre quién la ha creado, y por eso, al final, nos confundimos solos queriendo convertirnos un poco en dueños de la vida y buscando huir de la Cruz que el Señor nos da. En realidad esta Cruz -si la vives con Cristo- no es horrible como parece. Si te fías de él descubres que en este fuego, en esta Cruz, no te quemas, y que en el dolor está la paz y en la muerte está la alegría. Reflexionaba mucho, sobre todo este año, sobre la frase del evangelio que dice que el Señor nos da una Cruz dulce y una carga ligera. Sobre todo cuando veía a Clara que estaba a punto de morir, y estaba obviamente muy turbado. Así, me he llenado de valor y algunas horas antes, eran sobre las ocho de la mañana -Clara ha muerto a las doce- se lo he preguntado: "Clara, amor mío, pero, ¿esta Cruz es verdaderamente dulce, como dice el Señor?". Ella me ha mirado, me ha sonreído y con un hilillo de voz me ha dicho: "Sí, Enrico, es muy dulce". Así, toda la familia, nosotros no hemos visto morir a Clara serena: la hemos visto morir feliz, que es algo muy diferente.

-A tu hijo Francisco ¿qué le contarás de lo que ha ocurrido y, sobre todo, qué le contarás cuando te pregunte por mamá Clara?

Le contaré seguramente qué hermoso es dejarse amar por Dios, porque si te sientes amado puedes hacerlo todo. Esta es, en mi opinión, la esencia, la cosa más importante de la vida: dejarse amar para después, a nuestra vez, amar y morir felices. Esto es lo que le contaré. Le contaré que esto ha hecho mamá Clara. Ella se ha dejado amar y, en cierto sentido, me parece que está amando un poco a todo el mundo. La siento más viva hoy que antes. Y además, el hecho de haberla visto morir feliz para mí ha sido una victoria sobre la muerte. A mí me daba mucho miedo pensar, después de las experiencias de mis hijos, de David y María, poder ver morir también a mi hijo Francisco. Hoy sé que hay algo hermosísimo más allá, que nos espera.

-Cuando te dicen que hay este perfume de santidad en torno a Clara, ¿es algo que te molesta?

Sinceramente, me deja bastante indiferente. En el sentido de que Clara y yo habíamos hecho otras elecciones para la vida: hubiéramos deseado mucho envejecer juntos. Pero, también en este momento de nuestra historia, veo cómo Dios cada día me maravilla... Yo sabía que mi mujer era especial: creo que la felicidad, una persona es declarada beata porque beato significa ser feliz, Clara y en parte también yo hemos vivido toda esta historia con una gran alegría en el corazón, y esto me hacía intuir cosas grandes. Pero hoy estoy maravillado, porque me parecen mucho más grandes de lo que podría pensar

miércoles, 20 de junio de 2012

¿QUIÉN ESTÁ AL LADO DE LAS VÍCTIMAS DE ESTA CRISIS?

Fátima, evidentemente nombre supuesto, se presentó en la parroquia ayer a las cinco de la tarde. Venía con el carrito de la compra en la mano.
¿Es aquí donde dan comida y ayuda? Le expliqué que efectivamente se reparte comida, y los requisitos para acceder a la ayuda en alimentos. Es decir, o ser feligresa de la parroquia, o bien llegar aquí enviada por su parroquia de origen, lo que llamamos traer una hoja de derivación.
Fátima vive en el centro de Madrid. Con un niño de tres meses, sin trabajo, abandonada por el padre del niño y recogida temporalmente por un familiar. Acudió a los servicios sociales municipales y no encontró más ayuda que ser reenviada a Caritas de su parroquia . En su parroquia le dicen que no tienen recursos, que lo único que pueden facilitarle es ropa para el niño… y Dios le ampare.
Lo que me resultaba inexplicable es que apareciera por esta parroquia, que está a diez kilómetros de distancia y unas cuantas estaciones de metro. Por eso se lo pregunté: “¿Y cómo se te ha ocurrido venir aquí?”. Pues resulta que esta mujer se metió en internet a ver si encontraba dónde acudir. Y dio con este blog, y leyó que en la parroquia se repartían alimentos, y que había un proyecto de ayuda para embarazadas y madres con niños pequeños… Y aquí que se vino.
¿Y qué haces en ese caso cuando todo esto te lo cuenta sin dejar de llorar? Pues decirle que vale, que contara con nosotros, pero que necesitaríamos una carta de su parroquia, pero que de momento algo iríamos haciendo. Suerte que ayer estaban las voluntarias que atienden a las chicas embarazadas. Les presenté a Fátima y rápido se pusieron en marcha. Lo primero, encontrarle un buen coche de bebé, porque estaba llevando al niño en un carrito de esos de bastón, del todo inadecuado. Y sabanitas para el coche. Y un bono metro para que venga al taller y al menos salga de casa, hable con otras chicas y haga algo. Por supuesto que hubo alimentos para Fátima. Eso sí, la próxima vez vendrá con esa carta de la parroquia.
Fátima estaba muy sensible. Cuando vio el cochecito para su niño, las sabanitas, unos botes de leche para el bebé y algunas cosas para ella, pero sobre todo cuando se sintió acogida y animada… Se abrazó a nosotros, nos dio dos besos y nos decía… lo sabía, yo sabía que aquí no me podían fallar… Usted es bueno… me di cuenta leyendo el blog, sabía que no me abandonarían…
Se me hizo un nudo en la garganta y hasta se escaparon unas lágrimas. Fue como un latigazo. No. No soy bueno, ni medio bueno siquiera. Y no lo digo por falsa humildad.
Buenas son esas mujeres que a pesar de los pesares deciden sacar adelante su embarazo y traer sus hijos al mundo a pesar de no tener nada de nada. Buena Fátima, capaz de recorrerse medio Madrid a ver si consigue leche maternizada para su hijo. Buenos esos voluntarios que no saben de horas para estar cerca de la gente. Buena esa persona que acaba de dejar dos cajas de alimentos. Buena Carmen, que pasa horas ante el Santísimo porque según dice “estando la puerta abierta, alguien vendrá”.
Yo no. Yo soy tan sólo un afortunado que ayer vio cómo una madre derrotada y llorosa, podía volver a su casa sonriendo. Pero bueno, no. Eso no. Sólo afortunado… por pura misericordia de Dios.

Publicado en este BLOG

martes, 19 de junio de 2012

CHIARA CORBELLA, UNA VIDA Y UNA MUERTE EN CRISTIANO

Este sábado, en la iglesia de Santa Francisca Romana de Roma, se celebró el funeral de la joven Chiara Petrillo, tras un sufrimiento de cerca de dos años provocada por un tumor.
Una ceremonia nada fúnebre, una gran fiesta en la que participaron cerca de mil personas que llenaron la iglesia, cantando, tocando, aplaudiendo desde la entrada del féretro hasta su salida.

Es una historia extraordinaria la de Chiara que se ha difundido por la red, tanto que el video en Youtube ha registrado más de 500 visionados en un solo día.

Esta joven romana de solo 28 años, bella, luminosa, con la sonrisa siempre en los labios, murió por retrasar el tratamiento que habría podido salvarla, con tal de acabar el embarazo de Francisco, un niño esperado desde el primer momento de su matrimonio con Enrico.

No era el primer embarazo de Chiara. Los dos anteriores acabaron con la muerte de los niños, con graves malformaciones, nada más nacer.

Sufrimientos, traumas, sentimiento de desánimo, pero Chiara y Enrico nunca se cerraron a la vida, con lo que tras algún tiempo llegó otro embarazo: Francisco.

Esta vez las ecografías confirmaban la buen salud del niño, sin embargo al quinto mes a Chiara los médicos le diganosticaron una lesión de la lengua que tras una primera intervención, se confirmó ser la peor de las hipótesis: un carcinoma.

Desde entonces, una serie de luchas. Chiara y el marido, sin embargo, no perdieron la fe y “aliándose” con Dios decidieron una vez más decir sí a la vida.

Chiara defendió a Francisco sin pensárselo dos veces y aún corriendo un grave riesgo, retrasó su tratamiento llevando adelante la maternidad. Sólo tras el parto la joven pudo someterse a una nueva intervención quirúrgica más radical y luego a los sucesivos ciclos de quimio y radioterapia.

Francisco nació sano y guapo el 30 de mayo de 2011; pero Chiara, consumida hasta perder incluso la vista del ojo derecho, tras un año, no lo superó. El miércoles pasado, hacia mediodía, rodeada de parientes y amigos, acabó la batalla. Contra el “dragón” que la perseguía, como ella definía el tumor, en referencia a la lectura del Apocalipsis.

Como, sin embargo, se lee en la misma lectura –elegida no por casualidad para la ceremonia fúnebre- una mujer ha vencido al dragón. Chiara, en efecto, habrá perdido su combate terreno pero ha ganado la vida eterna y ha dado a todos un verdadero testimonio de santidad.

“Una segunda Gianna Beretta Molla”, la definió el cardenal vicario de Roma Agostino Vallini, que quiso rendir homenaje con su presencia a Chiara, a la que había conocido hace unos meses junto a Enrico.

“La vida es como un bordado del que vemos el revés, la parte desordenada y llena de hilos –dijo el purpurado--, pero de vez en cuando la fe nos permite ver un borde de la parte derecha”. Es el caso de Chiara, según el cardenal: “Una gran lección de vida, una luz, fruto de un maravilloso designio divino que se nos escapa, pero que existe”.

“Yo no sé lo que Dios ha preparado para nosotros a través de este mujer –añadió- pero es seguramente algo que no podemos perder; por ello recojamos esta herencia que nos recuerda dar el justo valor a cada pequeño o gran gesto cotidiano”.

“Esta mañana estamos viendo, lo que hace dos mil años vivió el centurión, cuando viendo morir a Jesús dijo: Este era verdaderamente el hijo de Dios”, dijo en su homilía fray Vito, joven franciscano, conocido en Asís, que asistió espiritualmente a Chiara y a su familia en el último periodo.

“La muerte de Chiara ha sido el cumplimiento de una plegaria”, añadió. La joven, contó el fraile, “tras la diagnosis médica del 4 de abril que la declaraba 'enferma terminal', pidió un milagro: no la curación, sino de hacer vivir estos momentos de enfermedad y sufrimiento en la paz a ella y a las personas más cercanas”.

“Y nosotros –dijo fray Vito visiblemente emocionado- hemos visto morir a una mujer no sólo serena sino feliz”. Una mujer que vivió gastando su vida por amor a los otros, llegando a confiar a Enrico: “quizá la curación en el fondo no la quiero, un marido feliz y un niño sereno sin la mamá son un testimonio más grande respecto a una mujer que ha superado la enfermedad. Un testimonio que podría salvar a tantas personas...”.

A esta fe Chiara llegó poco a poco, precisó fray Vito, “siguiendo la regla asumida en Asís por los franciscanos que tanto amaba: pequeños pasos posibles”. Un modo, explicó, “para afrontar el miedo del pasado y del futuro frente a los grandes eventos, y que enseña a empezar por las cosas pequeñas. Nosotros no podemos transformar el agua en vino, pero sí empezar a llenar las tinajas. Chiara creía en esto y esto la ayudó a vivir una buena vida y por tanto una buena muerte, paso a paso”.

Todos los asistentes se llevaron de la iglesia una plantita –por voluntad de Chiara que no quería flores en su funeral sino que cada uno recibiera un regalo- y en el corazón un “pedacito” de este testimonio, orando y pidiendo la gracia a esta joven mujer a la que quizá un día llamarán beata Chiara Corbella.
Publicado en Zenit.

lunes, 18 de junio de 2012

TESTIMONIO JESUS MANUEL GARCÍA-OCHOA


Sacerdote, sonsecano y actualmente formador en el Seminario Diocesano de Toledo.
El día 8 de Junio en el programa "Tu verás" de Radio Santa María, ofreció a todos su testimonio, el testimonio de su vocación.
En el siguiente enlace, podéis escucharlo.

http://www.architoledo.org/seminariomayor/elseminario/programaradio

sábado, 16 de junio de 2012

DOMINGO XI DEL TIEMPO ORDINARIO

En aquel tiempo decía Jesús al gentío:
«El reino de Dios se parece a un hombre que echa semilla en la tierra. Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo fruto sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega».
Dijo también:
«¿Con qué podemos comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después de sembrada crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros del cielo pueden anidar a su sombra».
Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.

Marcos 4, 26-34




Estamos llegando al final de curso, un tiempo de balances, de evaluaciones, de revisiones, de reuniones de todo tipo en las que se valora el trabajo realizado. Así lo hacemos también en las d iferentes instancias pastorales. A veces aflora una sensación de desconcierto y de desánimo al analizar el contexto social y cultural actual, o las enormes dificultades que nos toca superar y, sobre todo, al constatar el resultado conseguido en proporción a los esfuerzos realizados. Cuando surgen las dudas en padres y educadores, en catequistas y pastores, nos viene bien repasar el Evangelio de este domingo, porque ilumina la situación presente y, a la vez, es un remedio adecuado para nuestra impaciencia.
Jesús nos dice, a través de dos parábolas, que el reino de Dios es como una semilla que germina y va creciendo incesantemente, y también lo compara con un grano de mostaza. Las dos imágenes expresan que el reino de Dios va surgiendo poco a poco y crece a partir de comienzos humildes, y que las realidades grandes comienzan con sencillez y humildad. La primera parábola subraya la gratuidad del Reino, y la segunda explica el proceso de crecimiento del mismo. No se deben pretender resultados inmediatos, ni en cuanto a la cantidad, ni siquiera en cuanto a la calidad, porque los tiempos, los lugares y los ritmos de crecimiento no dependen de nosotros. Lo que sí nos corresponde es el esfuerzo generoso.

La esencia de la primera parábola está en la confianza. La gracia de Dios es eficaz, produce el desarrollo, aunque sea calladamente y en ocultamiento. Hasta que llegue el tiempo de la cosecha habrá que confiar en Dios y saber esperar. Saber esperar es una sabia consigna en medio de la impaciencia y del ajetreo de la vida moderna, esperar en tiempos de ansiedad y desesperanza. La esperanza serena es todo un programa de vida. El cristiano del siglo XXI, apóstol y sembrador, deberá saber esperar después de llevar a cabo su trabajo de siembra con la palabra y el testimonio.

La segunda parábola, la del grano de mostaza, remarca el crecimiento que va desde la más humilde insignificancia hasta el más completo desarrollo. La semilla de la mostaza, de ser la más pequeña de las semillas, se convierte en un árbol en cuyas ramas pueden anidar las aves del cielo. Nos ofrece la lección de una fe inquebrantable, de una esperanza que supera todos los desánimos, porque los caminos de Dios no son nuestros caminos, y porque, a pesar de todos los pesares posibles, el reino de Dios se desarrolla y dará un fruto abundante. Para el sembrador no existe el fracaso; lo que ha de existir siempre es la siembra constante y la confianza.

+ José Ángel Saiz Meneses
obispo de Tarrasa

viernes, 15 de junio de 2012

EL CORAZÓN DE DIOS

Con cuerdas humanas, con correas de amor lo atraía. También el corazón es instrumento de Dios. Porque el corazón de Jesús es instrumento de amor. Ayer, en una plenitud teológica maravillosa, vimos actuar a las manos de Dios, Hoy, al corazón de quien se nos presenta para hacer visible para nosotros el amor de Dios. En la corriente de san Francisco de Sales, quien influyó de manera asombrosa en la espiritualidad francesa, y de ahí en la espiritualidad de toda la Iglesia, cuando el racionalismo secante quería comenzar a ganar la partida —tiene importancia saber que el de Descartes nada tiene que ver con él—, nos puso ante la ternura del amor, ante el corazón amador y doliente de Cristo en la cruz, de cuya carne, cuando le traspasaron el corazón de una lanzada, salió sangre y agua. Instrumento de Dios que ha tenido desde entonces un lugar muy importante en la contemplación teológica de la Iglesia, porque ha humedecido con humedades de amor nuestra razón y nuestra vida.

El Sermón de Dios actúa sobre la carne conforme al modo concreto que Dios había establecido para crearlo todo. Dios tienen una forma de crear hablando con palabras calientes de amor. Hablando creó las seres de los cinco primeros días, el gran regalo que nos hizo al presentarnos lo creado para que le pusiéramos nombre. Hablando creó nuestra carne, mirando en su designio magnífico la carne del crucificado en donde encontramos nuestra imagen y semejanza, la que, ahora, se nos ofrece en las calenturas del corazón de Jesús. Pero, además, la carne, la carne del Hijo, por ello también nuestra carne, fue modelada por la mano de Dios, creando en él una fuente de amor en su corazón. Era necesario que comprendiéramos la fuente del amor. Que supiéramos mirar allá donde mana esa brote, el corazón de donde surgen las humedades del agua y de la sangre.

El Padre hizo al hombre, es verdad, pero, además, con sus manos, lo hizo semejante a él. Con el Hijo, dice Tertuliano, estaba formando la carne a imagen del Hijo encarnado, y con el Espíritu lo iba a santificar haciéndolo a su semejanza. Cristo es la imagen del hombre en la que se fija el Padre para modelarlo. Cristo se ha se vestir de hombre, lo que es posible porque quien lo moldea es la mano que se identifica con el mismo Verbo. Semejanza, tarea dinámica por la que la mano del Espíritu va conduciendo al hombre a la plenitud de su divinización. Las manos, así, son lo visible de Dios. Por esto, la plasmación del hombre en cuanto acción del Verbo nos pone ante las manifestaciones de Dios en el AT a través del Hijo y del Espíritu. En la creación de la carne por las manos de Dios, estamos viendo ya el designio de la recreación. A través de todo este proceso fluyente, después de la modelación de la carne de hombre recibe una segunda insuflación por el Espíritu, por lo que este hombre-carne recibe como donación una gloria superior al limo del que fue modelado Así, pues, imagen y semejanza.

Tocamiento de Dios en la creación del hombre. Tocamiento brutal de la lanza en el costado del crucificado que rompe su corazón. Tertuliano y los antiguos Padres, con una acuidad teológica sin par, miraban las manos de Dios que nos modelan contemplando al Hijo encarnado, lo cual nos hacen comprender en toda su profundidad el corazón amoroso del que, en el designio asombroso de Dios, muere en la cruz.

Publicado en www.archimadrid.org

jueves, 14 de junio de 2012

CONSAGRACIÓN AL SAGRADO CORAZÓN

Comenzamos la cuenta atrás para preparar el 100º Aniversario de la consagración de España al Corazón de Jesús. Este será un acontecimiento central para nuestro país, pues supondrá consagrar de nuevo nuestra querida España al Corazón de Nuestro Señor.
Se celebrará una Vigilia de Adoración en ese centro neurálgico de España: el Cerro de los Ángeles.

Hace unos días, el Santo Padre afirmaba: “Vemos cómo el mal quiere dominar en el mundo y que es necesario entrar en lucha contra el mal”.
Por todo esto, os invitamos a que asistáis a esta Vigilia con los jóvenes de vuestro Movimiento o con toda vuestra familia. Será una gran alegría poder estar todos juntos, en torno al Corazón de Jesús.

El acto consistirá en una Vigilia de oración que presidirá Mons. D. José Ignacio Munilla, Obispo de San Sebastián.
A continuación, habrá adoración durante toda la noche adorando al Santísimo por turnos que prepararán varios grupos y Movimientos.

Concluirá la Vigilia con la celebración de la Santa Misa, que presidirá Mons. D. Joaquín Mª López de Andujar, Obispo de Getafe.

Incluimos una serie de puntos prácticos para ese día que han Trasladado a ReL desde la organización:

 La acogida en el Cerro será a partir de las 21:30.

 La Vigilia comenzará a las 22:30.

 Los que quieran pasar la noche en el Cerro de los Ángeles, pueden traer saco de dormir y se indicará la zona habilitada para el descanso. También habrá la posibilidad de acampar con tiendas de campaña.

 Los Movimientos que quieran dirigir uno de los turnos de Adoración, comunicárnoslo cuanto antes a jovenesreinodecristo@gmail.com



Publicado en ReL

miércoles, 13 de junio de 2012

"Mi enfermedad es la mayor bendición de Dios"

Lizzie Velasquez no puede ganar peso debido a un extraño síndrome. Su horrorosa apariencia física la convirtió desde la infancia en el blanco de las burlas de sus compañeros de escuela que siempre la presentaron como "la mujer más fea del mundo". Ahora tiene 23 años y está segura de haber recibido una gran bendición de Dios. Se dedica a escribir libros y dar conferencias motivacionales por todo el mundo sobre la verdadera belleza. Nació en el seno de una familia católica, en Austin, Texas (Estados Unidos), y permanece muy activa en su comunidad y su parroquia. En una entrevista concedida a ACI Prensa asegura que "Dios es la razón número uno de por qué estoy aquí ahora. Él me bendijo con la bendición más grande de mi vida, que es mi síndrome. A pesar de que esto tiene sus dificultades, Dios ha estado a mi lado en cada paso del camino. Mi fe, mi familia y mis amigos son las tres cosas que me han hecho quien soy hoy". Frente a los obstáculos en su vida, Lizzie ha encontrado en la fe su principal razón para superarlos: "Además de mi familia y mis amigos, la fe es todo para mí. Cuando tengo un mal día, sé que todo lo que tengo que hacer es ponerlo en manos de Dios, y sé que él verá por mí para superar lo que sea. El primer lugar donde alguien puede encontrar su verdadera belleza es buscando dentro de sí mismos. La belleza no es definida como sólo la apariencia externa. La verdadera belleza es quién eres por dentro y quién te hizo Dios que seas". Para conocer más de Lizzie Velasquez, se puede visitar su página web www.aboutlizzie.com




Publicado en "Perder el miedo a equivocarse"

martes, 12 de junio de 2012

ALFONSO DEL CORRAL Y EL COTTOLENGO

El doctor Alfonso del Corral es un reconocido traumatólogo, que además fue jugador de baloncesto durante diez años, de 1978 a 1988, terminando su carrera deportiva en el Real Madrid. Desde 1994 a 2006 fue el Director del Centro Médico del Real Madrid. Pese a su éxito y reconocimiento público, su testimonio de fe consiste en poner por obra el evangelio y va al Cottolengo del Padre Alegre a colaborar como voluntario atendiendo a los enfermos incurables y con enfermedades degenerativas, que allí acogen.
Alfonso del Corral comparte su testimonio en el programa Más que noticias de 13 TV, entrevistada por el padre Javier Alonso. El doctor asegura que "en el Cottolengo, entidad que se sustenta de la providencia de Dios, hay una autenticidad que desborda. Se vive el evangelio auténticamente". Se decidió a ser voluntario cogiendo el testigo de sus padres que ya lo eran.
Del Corral muestra su admiración por el largo recorrido de las monjas que atienden el Cottolengo, las Servidoras de Jesús, que forman una familia con los enfermos y que tienen como camino de vida práctico "Dios proveerá". El doctor Alfonso del Corral dice que Dios se sirve de los pacientes que viven en el Cottolengo para bendecir a los voluntarios y al mundo: "Los enfermos te dicen que rezan por ti y por tu familia. Dios toca los corazones y los transforma a través de los enfermos". Esta es su experiencia vital.







lunes, 11 de junio de 2012

DISCUTIR vs DISPUTAR

1) Para saber
La paz es comúnmente aceptada y la lucha por obtenerla da sentido a muchos movimientos sociales. Sin embargo no siempre se está de acuerdo en los medios para conseguirla, sobre todo cuando afecta a los intereses personales.

La paz exige una tolerancia mutua, la cual no es una simple permisividad en que se acepta cualquier postura, sino que supone respeto. En cualquier ámbito debe imperar la paz: deportivo, familiar, político, etc. No se trata solo de soportar o aguantar a quien defiende una posición distinta de la personal, sino de fomentar y agradecer que se exprese, prestándole suma atención.

2) Para pensar

El escritor Alfonso Aguiló relata la historia de un pequeño cacique de una modesta población.

Se trataba de una persona que era alcalde de esa minúscula ciudad desde hacía muchos años, y nadie se atrevía a presentarse en las sucesivas elecciones municipales. Su dominio era completo. Nadie podía hacerle sombra ni rechistar sus órdenes. Toda decisión, hasta la más pequeña, pasaba por la mesa de su despacho.

Pasaron los años y un buen día, ante el asombro de todos, apareció otro candidato. Las siguientes elecciones ya no serían la historia de siempre. Se prometían realmente interesantes.

El eterno alcalde se sintió afrentado. Que alguien tuviera la desfachatez de hacerle la competencia era algo intolerable. No es que simplemente le molestara, es que no lo podía entender.

El insólito rival lanzó su programa, distribuyó su propaganda, hizo sus promesas, y llegó por fin el momento de que las urnas resolvieran aquella confrontación. La expectación fue grande. Todo era muy distinto que las veces anteriores.

Al final, por un estrecho margen, el nuevo candidato fue derrotado y el viejo cacique pudo respirar tranquilo. Enseguida hizo unas declaraciones a la prensa local. El recién reelegido alcalde estaba radiante de alegría. Tanto, que haciendo acopio de buenos sentimientos se refirió al vencido contrincante y dijo con voz solemne: "Le perdono".

Pensemos si también hoy, quizá alguna vez nos puede pasar, a nuestro nivel, algo parecido a lo que sucedió a este singular alcalde.

Podemos llegar, curiosamente, a considerar una ofensa que nos lleven la contraria, o que nos hagan legítima competencia, o que piensen de forma distinta a nosotros y lo manifiesten públicamente.

3) Para vivir


No es lo mismo discutir que disputar. Se puede discutir pacíficamente en donde las partes en conflicto expresen las razones por las cuales defienden su postura. La discusión es para examinar atentamente una afirmación. En cambio, la disputa implica cierta agresividad, se hace de modo terco, necio e incluso violento. Es la soberbia la que intenta imponerse a los demás, lo cual manifiesta una falta de equilibrio y de seguridad personal.

Publicado en FLUVIUM

Detrás de cualquier problema en la educación hay siempre un principio de soberbia. Son actitudes en las que se manifiesta ese pequeño tirano que todos llevamos dentro. Actitudes que si las viéramos desde fuera de nosotros nos parecerían tan ridículas o más que la de este alcalde a quien tanto costó perdonar al que había osado hacerle la legítima competencia en unas elecciones libres.

sábado, 9 de junio de 2012

CORPUS CHRISTI

Evangelio

El primer día de los Ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos:
«¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?»
Él envió a dos discípulos diciéndoles:
«Id a la ciudad, os saldrá al paso un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidlo, y en la casa adonde entre, decidle al dueño: El Maestro pregunta: ¿Cuál es la habitación donde voy a comer la Pascua con mis discípulos? Os enseñará una habitación grande en el piso de arriba, acondicionada y dispuesta. Preparádnosla allí».
Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la Pascua.
Mientras comían, Jesús tomó pan y, pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo:
«Tomad, esto es mi cuerpo».
Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron. Y les dijo:
«Ésta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios».
Después de cantar el himno, salieron para el monte de los Olivos.

Marcos 14, 12-16.22-26
 
Para muchos de los que participamos en la JMJ de Madrid 2011, el momento que con más fuerza nos ha quedado grabado en la memoria y en el corazón es la adoración del Santísimo que tuvo lugar en el aeródromo de Cuatro Vientos la noche del sábado. Después de una tormenta sobrecogedora, acompañada por fortísimas rachas de viento, llegó la calma. Y con la entrada del Santísimo Sacramento, se hizo un silencio profundo de oración. Un silencio impresionante mantenido por más de millón y medio de jóvenes. Todos, unidos al sucesor de Pedro, el Papa Benedicto, que se mantuvo firme frente al aguacero, vivimos un momento intenso de encuentro con Cristo presente en la Eucaristía.

La Eucaristía es un misterio de fe. Misterio que no podemos comprender, que no podemos abarcar. Misterio que podemos ir entendiendo progresivamente por la gracia de Dios desde una actitud humilde y contemplativa, poniéndonos de rodillas ante Dios. Es el centro de la vida de la Iglesia, es la fuente y la raíz de la existencia cristiana. Y, en consecuencia, toda nuestra vida ha de ser eucarística. Es toda la vida que se compromete, que se une a Cristo que se recapitula en un ofrecimiento a Él. Eucaristía es también comunión y es comunidad, comunidad de vida y amor. Así como los granos de trigo triturados forman el pan que se convertirá en el Cuerpo de Cristo, así los miembros de la comunidad eclesial forman también Su cuerpo, Su pueblo, Su familia, que es portadora y constructora de comunión con la Humanidad.

Cada celebración eucarística actualiza sacramentalmente el sacrificio de Jesús en la Cruz dando la vida por la salvación del mundo entero. Al mismo tiempo, en la Eucaristía Jesús nos hace testimonios de la compasión de Dios hacia cada persona que sufre, de su amor infinito. De esta manera, de la Eucaristía celebrada, vivida y compartida, brota como consecuencia el servicio de la cardad hacia el prójimo. Nuestras comunidades, cuando celebran la Eucaristía, han de ser cada vez más conscientes de que el sacrificio de Cristo es para todos y que, por eso, la Eucaristía impulsa a todo el que cree a entregarse a los demás y a trabajar por un mundo más justo y fraterno.

Cuando acabó la Vigilia de oración en Cuatro Vientos, el Papa dio las gracias a los jóvenes por su alegría y por su resistencia, que había sido más fuerte que la tormenta. Y les recordó que, con Cristo, podrían superar siempre las dificultades de la vida. Hoy, en nuestra celebración de Corpus Christi, pidamos al Señor que nos conceda una vida profundamente eucarística, de entrega, de ofrecimiento y de acción de gracias.
+ José Ángel Saiz Meneses
obispo de Tarrasa

viernes, 8 de junio de 2012

LA ADORACIÓN EUCARÍSTICA

Al celebrar en la tarde de este jueves la Santa Misa y la procesión eucarística por la solemnidad del Corpus Christi, el Papa Benedicto XVI dijo que la Eucaristía, el Sacramento del amor de Cristo, debe impregnar toda la vida cotidiana.

El Santo Padre celebró la Santa Misa en la Basílica de San Juan de Letrán, y posteriormente dirigió la tradicional procesión junto a miles de fieles, hasta la Basílica de Santa María la Mayor.

En su homilía, Benedicto XVI reflexionó sobre dos aspectos del Misterio eucarístico: el culto de la Eucaristía y su sacralidad.

El Papa explicó que es un error "contraponer la celebración y la adoración, como si estuvieran en competencia la una contra la otra. Es precisamente, todo lo contrario: el culto del Santísimo Sacramento constituye el ambiente espiritual en el cual la comunidad puede celebrar bien y en verdad la Eucaristía". "Sólo si está precedida, acompañada y seguida por esta conducta interior de fe y de adoración, la acción litúrgica puede expresar su pleno significado y valor", añadió.

"El encuentro con Jesús en la Santa Misa se realiza verdadera y plenamente cuando la comunidad es capaz de reconocer que Él, en el Sacramento, habita su casa, nos espera, nos invita a su mesa y, luego, una vez que la asamblea se ha disuelto, permanece con nosotros, con su presencia discreta y silenciosa, y nos acompaña con su intercesión, y sigue recogiendo nuestros sacrificios espirituales y ofreciéndolos al Padre". El Papa dijo luego que es importante en la sociedad mantener "lo sagrado (porque) tiene una función educativa, y su desaparición, inevitablemente empobrecería la cultura, especialmente en la formación de las nuevas generaciones".

"Si por ejemplo, en nombre de una fe secularizada y sin más necesidad de signos sagrados, se aboliese esta procesión ciudadana del Corpus Domini, el perfil espiritual de Roma resultaría ‘aplastado’, y nuestra consciencia personal y comunitaria quedaría debilitada... Pensemos en una madre y un padre, que en nombre de una fe secularizada, privasen a sus hijos de toda ritualidad religiosa: en realidad terminarían por dejar campo libre a muchos sustitutos pertenecientes a la sociedad del consumismo, y a otros signos que más fácilmente podrían convertirse en ídolos", explicó.

En este sentido, recordó que Dios mandó a su Hijo al mundo "no para abolir, sino para dar cumplimiento a lo sagrado. Y en el culmen de esta misión, en la Última Cena, Jesús instituyó el Sacramento de su Cuerpo y de su Sangre, el memorial de su Sacrificio pascual... De este modo, se puso a sí mismo en el lugar de los antiguos sacrificios, pero lo hizo dentro de un rito que encomendó a los Apóstoles perpetuar, el signo supremo del verdadero Sagrado, que es Él mismo".

Benedicto XVI recordó luego que la Eucaristía, "el Sacramento de la Caridad de Cristo debe permear toda la vida cotidiana": "En efecto, concentrando toda la relación con Jesús-Eucaristía en el único momento de la Santa Misa, nos ponemos en el riesgo de vaciarnos de su presencia el resto del tiempo y el espacio existencial. Y así, se percibe menos el sentido de la presencia de Jesús en medio de nosotros y con nosotros, una presencia concreta, cercana, entre nuestras casas, como ‘Corazón latente’ de la ciudad, del país, del territorio en sus diversas expresiones y actividades", dijo.

Al recordar algunas vigilias eucarísticas de preparación a la Santa Misa junto a los jóvenes, el Papa recordó con alegría la de Colonia en 2005, Londres, Zagreb, o Madrid en 2011, e indicó que también son una excelente forma de preparar el corazón para el encuentro y hacerlo todavía más fructífero. "Estar en silencio por un tiempo ante al Señor presente en el Santísimo Sacramento es una de las experiencias más auténticas de nuestro ser Iglesia, que acompaña complementariamente la celebración Eucarística, escuchando la Palabra de Dios, cantando, y sentándose juntos en la mesa del Pan de vida".

De este modo, continuó, "el verdadero amor, y la verdadera amistad viven siempre de esta mirada recíproca, de silencios intensos, elocuentes, plenos de respeto y de veneración, para que el encuentro sea vivido profundamente, de modo personal y no superficial".

"Si por desgracia –lamentó– faltara esta dimensión, también la misma Comunión sacramental se puede convertir por nuestra parte en un gesto superficial. En cambio, en la verdadera Comunión, preparada por el diálogo de la oración y de la vida, podemos decir al Señor palabras de confianza".

El Santo Padre indicó que el culto de la Eucaristía y su sacralidad son necesarios tomarlos más en consideración para "preservarlos de visiones no completas del mismo Misterio". La adoración al Santísimo Sacramento es una celebración "en la que el Señor convoca a su pueblo, lo reúne a la doble mesa de la Palabra y del Pan de vida, lo alimenta y lo une a sí mismo en la ofrenda del Sacrificio".

miércoles, 6 de junio de 2012

"POR FIN DESCANSÉ"


Durante el encuentro vocacional con Kiko Argüello,
en la Plaza de Cibeles, el día siguiente a la clausura
de la JMJ de Madrid 2011

A la tercera JMJ, fue la vencida:

«Por fin, descansé»

La Hermana Inmaculada tardó varios años en darle el definitivo a Dios. Su corazón necesitaba tiempo, y el Señor la esperó, paciente. El desencadenante final fue la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid. Volvió a casa, en Murcia, para anunciar la decisión a su familia, y deprenderse de casa, trabajo, coche... «Fue impresionante la paz y tranquilidad que sentí -dice-. El Señor me estaba pidiendo todo... Y todo es todo»


Nací en Murcia en el seno de una familia cristiana perteneciente al Camino Neocatecumenal. Soy la segunda de seis hermanas. Entregué mi vida al Señor en el Carmelo a los 35 años, el 8 de diciembre -día de mi nacimiento- de 2011.
Aunque parezca extraño, muchos años antes había sentido ya la llamada del Señor. Fue en la JMJ de París, de 1997, cuando empecé a caer en la cuenta del amor del Señor por mí. Tenía novio, y como mi ilusión era casarme y tener muchos hijos, decidí no hacer mucho caso al Señor. Con 17 años, monté un salón de belleza.
Unos años después, en la JMJ de Colonia, el Señor me visitó de nuevo, recordándome que me quería para Él. Empecé a corresponder a su llamada, y se lo dije a mis catequistas, e incluso a mis padres. El Señor me llamaba a vivir en sencillez y humildad, y esto me hizo cambiar interior y exteriormente: mi forma de vestir, de actuar... Sin embargo, tenía que saldar la deuda del salón de belleza, pues no podía dejar a mis padres con esa carga. Le dije al Señor: «Cuando termine de pagar, me entregaré a Ti, espérame».
De nuevo me fui dejando llevar por lo que el mundo me ofrecía: los caprichos, las fiestas, mi afán de casarme... Y me impuse nuevas cargas: un coche, una casa... Estoy convencidísima de que el Señor estaba detrás de todo. Su Providencia evitó en el último momento que me casara, y permitió la enfermedad en mi vida: sufrí muchísimo, pues quería que el Señor me dijera si me quería casada o monja. La respuesta llegó en el momento justo. Es impresionante cómo hace Él las cosas; no hay quien le gane en generosidad...
En octubre de 2010, en una convivencia de inicio de curso con la Comunidad, el Señor me tocó muy fuerte: ya no me pude callar. Era tal la llama que ardía en mi corazón, que no me pude resistir y me rendí en sus brazos. Sin darme cuenta, ese mismo mes terminé de pagar la deuda de mi negocio, y el Señor me recordó la promesa que un día le hice. Es impresionante cómo Él ha ido moviendo todos los hilos de mi vida hasta traerme aquí, a su casa, al Cielo.
El mundo, los amigos... me hacían pensar que era muy mayor, que dónde iba yo con mi edad, pero ¡qué grande es el Señor! Él tiene un tiempo para cada uno. Todos estos años me han servido para madurar, para centrarme, para ir creciendo en su amor, y ha ido poniendo personas en mi vida que han dado luz a mi historia.
Mi , mi fiat definitivo fue después de la JMJ 2011, de Madrid. El Señor me regaló el poder formar parte de la comisión del voluntariado para los Días en las Diócesis, anteriores a la JMJ, lo que fue una oportunidad extraordinaria para prepararme al encuentro definitivo con Jesucristo.
Le dije que definitivamente al Señor en el encuentro con Kiko Argüello en la Plaza de Cibeles. Fue como un decir: Tómalo todo. No tenía ni idea de a dónde tenía que ir; sólo sé que me levanté y una barrera que tenía a mi izquierda fue retirada, abriéndome camino. Fue impresionante la paz y tranquilidad que sentí.
Después de este encuentro, todos los jóvenes que peregrinábamos juntos continuamos nuestro camino por la ruta de los místicos. El último día, llegamos a Ávila a visitar la Casa de santa Teresa. Llegamos por la mañana al monasterio de la Encarnación a participar en la Santa Misa. Durante la misma, ya le pedí al Señor la gracia de entrar en el Carmelo. Por la tarde, nos acercamos al torno, donde una Hermana nos contó su vocación. Vi claramente que ésta era mi casa.
Volví a Murcia y, al día siguiente, llamé por teléfono a la Madre Priora. El 24 de septiembre fui al Carmelo a pasar unos días, y me dieron la fecha de entrada. Yo le dije al Señor: «Hasta ahora, Tú lo has hecho todo y me has sido fiel; si éste es mi sitio, Tú lo harás». Por fin, descansé.
De camino a Murcia, me empezaron a entrar los nervios, porque me tocaba decirlo en casa, pero fue impresionante la paz y tranquilidad que el Señor me dio. Yo no hacía nada; todo lo iba haciendo Él. El dejarlo todo: coche, casa, negocio, familia... no me supuso sufrimientos ni preocupaciones; yo sólo me dejé llevar. No había marcha atrás.

Una entrega total

El 8 de diciembre, entré en el monasterio de la Encarnación, de Ávila, con una alegría y felicidad inmensas. Ya antes de entrar, la gente me decía: «Estás cambiada». Era verdad, no era yo: el Señor me estaba transformando para mi inminente entrega; una entrega total, porque el Señor me lo estaba pidiendo todo... Y todo es todo. No podía quedarme a medias, no podía engañar al Señor.
Tengo clarísimo que Él me ha traído hasta aquí, de la mano de la Virgen. Gracias a ella estoy en su Casa. ¿Qué sería de mí sin ella? Saber que la tengo como Madre me tranquiliza, me consuela, me anima. Estar aquí en su Casa es un regalo que jamás hubiera podido imaginar: «El Carmelo es todo de María».
Habiéndolo tenido todo, hubo quien me preguntó: «Pero ¿qué te falta?» Ahora lo sé: ¡Me faltaba esto! No echo de menos nada: Él lo llena todo, incluso el vacío de no tener a la familia cerca. Y no es que yo haya dejado de quererlos; al contrario: los quiero mucho más. Es un amor distinto: ahora está Dios en medio de nosotros, y es para mí una alegría inmensa ver cómo todo esto es también un regalo para ellos. Me llena de gozo ver la felicidad que mi familia siente al tener una hija carmelita.
Sabía que, si lo dejaba todo, el Señor me iba a ayudar y sería muy feliz, pero no podía imaginarme que esta felicidad iba a ser tan grande. El Señor me ha regalado más hijos que los que yo quería tener: la Iglesia entera.

Hermana Inmaculada
Carmelitas descalzas
Monasterio de la Encarnación
Publicado en Alfa y Omega

martes, 5 de junio de 2012

RAP CATÓLICO

Fresh Sánchez lanza su segunda maqueta de Rap Católico "FRESH", artista católico de 26 años afincado en Toledo, miembro de Raper@s Católic@s Dawidhs nombre del colectivo que forma junto a smdani y Blanca-White.



domingo, 3 de junio de 2012

"CONTEMPLADLO Y QUEDARÉIS RADIANTES"

Para todas las formas de Vida Consagrada existe ya una jornada mundial común el día 2 de febrero, pero para los contemplativos la Iglesia señala una fecha propia, celebrada –y no por casualidad– el domingo de la Santísima Trinidad: es la Jornada Pro Orantibus, la Jornada por aquellos que oran.
En la jornada Pro orantibus, que tiene lugar este domingo 3 de junio de 2012, la Iglesia dedica un día del calendario para fomentar el conocimiento y la oración por todos aquellos religiosos y religiosas dedicados a la vida consagrada contemplativa. Ésta es una vocación poco conocida y entendida en el mundo de hoy, tan aferrado a sus comodidades, su libertad de movimientos y su utilitarismo.
En el día Pro orantibus a los católicos se les invita a orar a favor de los religiosos y religiosas de vida contemplativa, como expresión de reconocimiento, estima y gratitud por lo que representan ellos y ellas, y el rico patrimonio espiritual de sus institutos en la Iglesia.
Las diversas formas de Vida Consagrada son para todo el Pueblo de Dios una gracia con la que el Señor nos bendice a cada generación cristiana. Efectivamente, son visibles y palpables los espacios en los que el ardor misionero de una evangelización eclesial explícita, el trabajo educativo con niños y jóvenes, la solicitud caritativa hacia los pobres, los enfermos o los ancianos, llenan hermosas páginas de testimonio evangélico. Pero hay una presencia especial que por su peculiar índole, la Iglesia quiere subrayar de un modo particular: los monjes
y monjas contemplativos.
Se trata de una cita discreta y silenciosa con cuantos discreta y silenciosamente oran por toda la Iglesia y la Humanidad.

sábado, 2 de junio de 2012

DOMINGO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD

Evangelio

En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos dudaron.
Acercándose a ellos, Jesús les dijo:
«Se me ha dado todo poder en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado.
Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el final de los tiempos».

Mateo 28, 16-20
 
Celebramos la solemnidad de la Santísima Trinidad, misterio supremo, central, fundamental, de nuestra fe; el misterio de un solo Dios en tres personas. Un misterio que sobrepasa, que desborda absolutamente nuestra inteligencia humana, al que podemos acceder desde la fe. Un misterio revelado por Cristo, que debería ocupar la mayor parte de nuestra oración y estudio, que debería ocupar más espacio en las catequesis y predicaciones, y también debería ser el elemento principal de la vida de fe de los fieles. Es un misterio de amor de Dios a sus hijos, que debemos contemplar en actitud de adoración.
El Padre es el origen, el Hijo es la revelación y el Espíritu Santo es la comunicación. Contemplamos al Padre como Creador y Padre misericordioso, que conoce, que actúa, que ama. Es la Vida misma, el Santo, es la misericordia, el Amor. Su paternidad respecto al ser humano es real, es eterna y total, continua y consciente. Es decir, que nada poseemos que no proceda de Él. En esto consiste la Buena Nueva del Evangelio, en que somos hijos de Dios, llamados a formar una familia en fraternidad y comunión.
Cristo es el Hijo unigénito, eterna Sabiduría encarnada. Contemplamos su realidad humana, su cuerpo real, su conocimiento, su voluntad, su amor, su sensibilidad. Contemplamos su realidad personal divina, como el Hijo de Dios. Contemplamos al Hijo, que es apertura a la comunicación del Padre, eternamente engendrado, que todo lo recibe del Padre. Nosotros, sólo podremos vivir nuestra filiación y desarrollar nuestra personalidad de hijos de Dios en apertura al Padre y al Hijo.
Contemplamos al Espíritu Santo, que posee la misma divinidad del Padre y del Hijo, y que, por lo tanto, es infinito, omnipotente, y sobre todo es amor. El Espíritu Santo es como el fruto del amor recíproco del Padre y del Hijo. Él guía al creyente hacia la verdad y el bien, y mueve el cosmos y la Historia hacia la plena recapitulación final. Bajo su luz, el creyente avanza en el conocimiento de Cristo y del Padre, y por su impulso es capaz de ser ante el mundo testigo de la Verdad.
El fundamento de la vida y de la espiritualidad cristiana es la realidad de que Padre, Hijo y Espíritu Santo han querido constituirse en principio de vida nueva para nosotros. Por eso, todos los elementos que componen nuestra vida han de estar referidos a esta relación personal y, asimismo, los planteamientos espirituales han de estar centrados en la inhabitación de la Santísima Trinidad. Que la gracia de Nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo (véase 2Cor 13, 13) nos ayuden a penetrar en este misterio de amor y a dejar que transforme nuestra existencia.
+ José Ángel Saiz Meneses
obispo de Tarrasa

viernes, 1 de junio de 2012

ZANETTI, EL FUTBOL Y DIOS

El jugador de fútbol argentino y capitán del equipo italiano Inter de Milán, Javier "Pupi" Zanetti, dio su testimonio como padre de familia en el Encuentro Mundial de Familias que se inició ayer en esa ciudad y que contará el fin de semana con la presencia del Papa Benedicto XVI.

"Mi sueño era ser futbolista y he hecho de todo por lograr convertirme en un futbolista importante, pero me gusta mucho estar en familia, estar en mi casa con mi mujer y mis hijos", dijo en declaraciones dadas a conocer por los organizadores del Encuentro.

"De mi padre aprendí el sacrificio. Nosotros somos privilegiados, aunque tenemos la posibilidad de dar todo a nuestros hijos es necesario decir no: a ellos debemos hacerles comprender que sin sacrificio no se obtiene nada", agregó el capital del Inter.

En el año 2008, cuando el Inter cumplió 100 de años de fundación, el Papa Benedicto XVI recibió de obsequio de manos de Zanetti una camiseta del club con su nombre "Benedetto XVI".

En aquella oportunidad y al final de la audiencia general del 8 de mayo, Zanetti comentó que "sin Cristo el hombre no puede vivir plenamente" y reconoció que "la bendición del Papa es un estímulo más para que comprendamos nuestro papel de testigos cristianos, en la familia y en el deporte, y el deber de estar junto a las personas desafortunadas, sobre todo los niños".

Javier Zanetti y su esposa dirigen la Fundación Pupi dedicada a "devolver la fe, la dignidad y la esperanza a la niñez en estado de riesgo social y a sus familias", según se aprecia en su sitio web.

En el año 2010, cuando se jugaba la Copa del Mundo en Sudáfrica, el diario La Nación de Argentina reveló que el jugador holandés Wesley Sneijder, autor del gol que eliminó a Brasil, se convirtió al catolicismo y recibió el Bautismo poco antes de viajar al campeonato. Influyeron en su decisión su novia Yolanthe Cabau y su amistad con Zanetti.

Javier Adelmar Zanetti nació en Avellaneda, Buenos Aires (Argentina) el 10 de agosto de 1973. Antes de llegar al Inter en 1995 jugó en el Banfield. En Italia es el jugador extranjero con más partidos en la Serie A italiana y el jugador con más partidos en la Serie A con el Inter. Juega en la selección argentina desde 1994.

El sábado el Papa Benedicto XVI estará justamente en el estadio Giuseppe Meazza del Inter de Milán, donde se reunirá con cientos de jóvenes próximos a recibir el sacramento de la confirmación.
 
Publicado en ReL