miércoles, 19 de septiembre de 2012

PENSAMIENTOS QUE SANAN




Las carencias afectivas o materiales pudieron haber dejado en nosotros inseguridades interiores. Estos vacíos hacen que mucha gente se apegue a los bienes materiales o las personas, ansiando todo aquello que no poseen.
El conflicto se genera debido a que, como siempre, son más las cosas que no se poseen que las que se tienen, existe un margen suficientemente amplio para la infelicidad.
El estar deseando para nuestra vida aquellas cosas que no se necesitan, es fuente continua de ansiedad e insatisfacción, siendo que en realidad, necesitamos muchísimo menos de lo que la mayoría de nosotros tenemos, y menos aún de aquello que tanto suspiramos conseguir.

Sólo en Dios descansa mi alma, de él me viene la esperanza. Sólo él es mi roca salvadora, él es mi baluarte: nunca vacilaré. Mi salvación y mi gloria están en Dios; él es mi roca firme, en Dios está mi refugio. Salmo 62, 6-8.

P. Gustavo Jamut

1 comentario:

Anónimo dijo...

te invitamos este 1-2-3 de Diciembre a nuestra feria catolica internacional que se realizara en el parque de la industria