miércoles, 23 de marzo de 2011

CREADOS PARA LA ETERNIDAD

Son muchas las cosas que nos que nos pasan y a las que no le encontramos explicación. Pero todo se explica, la explicación básica, se encuentra, en que nosotros, no hemos sido creados para vivir en este mundo, sino en otro que será nuestra eterna casa. Y esta sencilla explicación que justifica en gran parte, las contradicciones, inconvenientes y sufrimientos que soportamos en esta vida, no le caben en la cabeza a la mayor parte de seres humanos que ahora vivimos aquí, pero que un día partiremos de este mundo. ¡Claro!, que tampoco les cabía en la cabeza, esta sencilla realidad, a los que nos precedieron y mucho me temo que tampoco les va a entrar en la cabeza, a los que vienen detrás de nosotros. Procuremos, que ¡al menos! Nos quepa a nosotros, porque si nos cabe si nos la metemos en la cabeza, estad seguro que viviremos aquí abajo más felices.



Más de una vez, todos hemos oído decir, que: “Somos criaturas creadas para vivir en otro mundo y aquí solo estamos de paso”. Y sin embargo esta realidad, a todos nos entra por un oído y nos sale por el otro. Algunas veces creo que los que nos lo dicen, ni ellos mismos se lo creen. Y ello es, porque nuestra fe la de todos, sea la de los que nos lo dicen, sea la nuestra o sea la del que está escribiendo, no vale dos duros. Más de dos mil años han pasado y personalmente no tengo noticias, de nadie que con su simple deseo, haya trasladado un monte: “Por vuestra poca fe. Porque yo os aseguro: si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: "Desplázate de aquí allá", y se desplazará, y nada os será imposible” (Mt 17,20). Es decir nuestra fe ni siquiera tiene el tamaño de un grano de mostaza.

Es muy conocida la frase de San Agustín, que dice: “Nos hiciste Señor para Ti, y mi corazón está inquieto, hasta que descanse en Ti” Y como quiera que no estamos hechos para esta vida, aunque ella sea solo la única que conocemos, aquí no está nuestra casa. Y precisamente porque no vemos más allá de nuestras narices, nos apegamos a este mundo, en el cual todos estamos solo de paso, para cumplimentar una prueba de amor. Una prueba de amor a nuestro Creador.


Sigue leyendo AQUÍ

1 comentario:

LAH dijo...

ESTA VERDAD SE NOS OLVIDA TANTAS VECES, PARA MI ES UN CONSUELO GRANDISIMO CUANDO ENTRO EN ELLA, PORQUE MENGUAN LAS COMPLICACIONES COMO CUANDO PONES UN TROZO DE HIELO AL SOL. UN ABRAZO